3.8.13

¿Se repetirá la historia?

La Centro Derecha tiene mucho que aprender le cuesta unirse. Se pelean y se separan por diferencias, a veces valóricas, otras sencillamente de estrategia política. La Udi se molesta porque Allamand competirá con Zalaquett  en Santiago Poniente, y R.N. porque Golborne  va en el Oriente.
Nunca piensan en positivo, de antemano asumen que dos candidaturas fuertes no permiten un doblaje. Cada cual quiere un candidato que aporte votos, pero que no le gane al de su partido.
Nos preguntamos se repetirá la historia en la Alianza con tanto tironeo a quien, con toda seguridad, será la candidata única del conglomerado oficialista.
R.N. decidirá en su consejo nacional si ratifica el apoyo que la directiva del partido entregó a Evelyn Matthei. En la centro derecha, surgirá el mismo síndrome de auto destrucción que enfrentaron a Lavín con Piñera. Recordaran que la suma de los votos de ambos candidatos era mayor de quienes votaron por Bachelet en primera vuelta. En Segunda la histona fue diferente, se sumaron los votos de otros candidatos de la izquierda chilena, incluyendo al P.C: que ahora corre por dentro, pero además a Piñera se le restaron muchos votos de los “lavinistas”.
El oficialismo se está consumiendo en ridículas pasadas de cuenta, piensan cupularmente y no escuchan a sus militantes y simpatizantes.
Inventaron algo nuevo que la candidata congele su militancia, eso sería más lógico cuando asumiera como Presidencia de la República, hacerlo antes no tiene ningún significado. Renace la vieja lucha de siempre de la UDI y R.N. que ha provocado el alejamiento de la vida partidaria de muchos militantes que prefirieron independizarse políticamente, ante directivas que solo se miraban el ombligo, sin percatarse que la lucha por el poder es también una conquista de las conciencias de los electores, que ahora no son obligados a votar.
Hay en política una doble tarea, convencer al elector que su voto es necesario y, además, convencerlo porqué un candidato es mejor que otro.
Pero las rencillas entre los dos partidos oficialistas, también ocurren en la Concertación  con  la irrupción del P.C. una trabajosa lista parlamentaria.
La última guinda de la torta, Bachelet pide que se suspenda la agenda legislativa. Su comando no quiere ley del deporte hasta después de las elecciones. ¿Se paraliza el país, para no perjudicar a la señora?