20.12.08

El parte del senador

Lo que más daña a la denominada “clase política”, es la percepción ciudadana de los privilegios que ostenta, negados a la mayoría de los chilenos. Fijan sus rentas, los subsidios a gastos y otros estipendios que les colocan en un nivel diferente de sus representados.

El senador Guido Girardi aún debe estar arrepentido del verdadero exabrupto que significó, en un momento de suprema egolatría acusar a dos uniformados con la Subsecretaria de Carabineros, porque le habían cursado un parte a su conductor, aduciendo falta de consideración a su investidura senatorial. La Subsecretaria, con poco criterio frente al tema, traspasa la queja senatorial a la Dirección General de Carabineros. El resultado inicial dos días de arresto, sin derecho a investigación, sumario o conversación, a carabineros que cumplían su deber.

¿Quién se cree que es el senador que puede estar por sobre la ley? El señor Girardi comete dos graves errores, acusa que el carabinero ni siquiera miró su credencial de senador, ¿para qué tenía que mirarla si el infraccionado por exceso de velocidad era su conductor? ¿Pretendía acaso que el carné de Senador de la República le exculpaba de una falta cometida por un tercero, su chofer?

El segundo grave error lo comete cuando acude a la Subsecretaria de Carabineros, Javiera Blanco, por algo tan nimio. ¿Tiene un ciudadano común igual posibilidad cuando le asaltan en la calle o le roban en su hogar? Ejecuta, así, una revancha absurda contra funcionarios público que cumple con la ley.

Se excusa el Senador diciendo que, momentos antes, pasó una comitiva, con escolta policial, a gran velocidad y no fue infraccionada. Suponemos que una comitiva, me imagino oficial, puede circular más rápido, si va protegida por seguridad policial. Eso ocurre con frecuencia con Ministros de Estado o figuras publicas, nacionales o extranjeras, que se desplazan por calles y carreteras. ¿Quiere Girardi escolta especial para él?

En definitiva, al igual que en el episodio de los sobres pagados por la Presidencia de la cámara, el Senador muestra como se abusa de una investidura de elección democrática, para tener prebendas y recibir pleitesías variadas.

Este desgraciado episodio donde dos funcionarios policiales son castigados, con la concomitancia de una autoridad de gobierno y de la propia institución a la que pertenecen, nos muestra como se abusa del poder y se cometen injusticias que repugnan. ¿Igualdad ante la ley? ¡Pamplinas!

El viernes muchos de los involucrados iniciaron la operación “recular”. Carabineros declaró en voz de su máxima autoridad que revisaría el caso. La comisión de ética del senado acordó citar a Girardi.

Cómo le irá al senador en su anunciado recorrido por el país, luego de este escándalo, presentando un programa de gobierno. ¿ Se lo imaginan de Presidente de la República?

Ya ha llegado el momento que se actúe con inteligencia y modestia, cuando se orienta el trabajo al servicio público. No es ético privilegiarse del cargo que, tanto lo da como lo quita, se obtiene del ciudadano al momento de votar.

Hay senadores y diputados, todos los conocemos, que utilizan sus influencias para colocar a partidarios en cargos públicos, no importa si tienen capacidad o no, solo interesa sean buenos operadores políticos.

Hay senadores y diputados que, para los actos electorales, influyen instalando a sus más cercanos para que integren las nóminas en elecciones, atropellando la voluntad de las asambleas partidarias, a fin de seguir escalando en su carrera política.

El ciudadano común que no tiene rango ni carné de privilegio espera, con santa paciencia, años para que se aprueben leyes que le favorecen. Leyes que se enredan en miles de indicaciones distintas al tema que le dieron origen. Cada cual propone una tajada diferente con los ojos puestos en cálculos electorales y no en el bienestar de los chilenos

Es de esperar que el parte lo pague el infraccionado, sería bueno saberlo, y que la influencia de la Subsecretaria de Carabineros no llegue hasta impedir que la ley se cumpla.

Estamos seguros que no todos los parlamentarios piden o reciben privilegios, o hacen uso de mala manera de sus credenciales, distintos al ciudadano común pero, lamentablemente, los buenos y los malos, los abusadores y los que prestan un legítimo servicio público para el cual fueron elegidos, constituyen una “casta” diferente que, cada día, busca motivos para justificar el desprestigio que las encuestas unánimemente señalan.

13.12.08

Los candidatos.


Resta un año para las elecciones presidenciales. Se perfilan los candidatos. La democracia Cristiana con Eduardo Frei Ruiz Tagle, ex Presidente de la República. La Alianza acuerda el nombre de Sebastián Piñera. Los radicales van a primarias con el senador José Antonio Gómez, mientras el partido Socialista no logra acuerdo con el PPD para apoyar al dubitativo José Miguel Insulza. Es lo que hay.
Como lo escribimos la semana pasada, esta llegó y se ha ido dejando algunas cosas claras. Las presidenciales comienzan a despejar dudas en lo que ocurrirá los próximos meses. La democracia cristiana y el radicalismo han definido que tienen candidatos para la primaria de abril.
El ala autodenominada progresista, PPD y PS, aún no logra acuerdo y no ha podido levantar la candidatura Insulza. El viernes por la noche se suspendió un encuentro, con figuras relevantes de ambos partidos, donde el organizador era el amigo cercano del pre candidato, José Antonio Viera Gallo. En el PPD se molestaron por la organización de este abortado encuentro ya que ellos deben definir si se suman a la candidatura del actual Secretario General de la OEA o levantan candidato propio para primarias. La excusa para suspender la comida fue “razones de agenda”.
El problema en el progresismo reside en que el PPD siente que sus amigos del ala izquierda de la Concertación les presionan más allá de lo razonable. En círculos políticos del oficialismo “progresista”, se siente que no habrá candidatura Insulza si no se cuenta con el apoyo del PPD.
Lo más probable es que el Secretario General, regrese a Washington, sin una definición clara y, como lo dijo a su llegada, solo en enero entregaría una respuesta definitiva. Muchos se preguntan no será dar demasiada ventaja.
Frei ha jugado bien sus cartas. Su experiencia en política y los asesores, todos avezados en la materia, fueron, sin prisas estructurando una agenda iniciada antes de las municipales. Todo se dio favorable, perdieron votación como partido, lo que sacó del medio a la casi segura candidata presidencial Soledad Alvear. No se trata que expresamente buscaran una derrota, pero los porcentajes demostraron que, la expulsión de un senador y la renuncia de cinco diputados, no fueron buenas decisiones que terminaron por defenestrar a la senadora Alvear.
Frei fue el primero en aceptar competir en primarias, ante un Lagos lleno de condiciones, críticas y cartas, a la coalición oficialista, a lo cual siguió una serie de propuestas interesantes, incluyendo reformas constitucionales.
En el radicalismo José Antonio Gómez ha elegido el mejor camino, aprovechar el buen momento electoral que vive su partido no cediendo en su pretensión de ir a primarias. Estas elecciones, que creo son un gran activo de la concertación, permiten hacer propuestas y fijar derroteros. El radicalismo debe volver al centro del cual se alejó hace varias décadas, abandonando a la clase media que fue el sustento que lo dio tres presidentes. Se mimetizó con partidos como el socialista integrándose a un “progresismo” que, como concepto ideológico, el ciudadano común no entiende. Gómez puede conducir a su partido a reflejar la política del siglo XXI.
El lenguaje común es hablar siempre de “los más necesitados”. Desde la derecha a la izquierda más extrema, dan la impresión que Chile está constituido solo por ciudadanos necesitados, olvidándose que la clase media es bastante más del 60% de la población. Ese lenguaje daba muchos votos hace 40 años.
Finalmente está Piñera, cuyo principal flanco donde se le ataca, en un discurso de la década de los 50, es su calidad de empresario, como si ser exitoso en la vida debería ser signo de vergüenza. La UDI acordó su apoyo, pero no su proclamación, según Coloma por razones legales lo hará el próximo año. No era lógico una proclamación en un Consejo General ampliado menos cuando, oficialmente, su propio partido R.N. aún no lo hace.
Piñera lidera las encuestas pero su equipo deberá preocuparse que su cercanía a la gente se acentúe, uno de los aspectos vitales cuando se quiere ganar.Los candidatos comienzan a pararse en la cancha, es de esperar que su discurso no se centre en “la dictadura” o en los desposeídos exclusivamente que resulta un contrasentido cuando se habla de lo mucho que se ha progresado. Entonces podremos tener la suerte de escuchar ideas innovadoras y atrayentes.

6.12.08

Que llegue luego la próxima semana

Muchos políticos quieren que llegue luego la próxima semana. Antes de pascua el oficialismo espera tener resuelto aquello de “no son todos los que están, no están todos los que son”. Se vive este fin de semana largo el duelo de perder a su mejor carta presidencial y la luz del sol se ha escondido, para algunos pesimistas, para siempre.
Tremendo dilema el que se abrió en la Concertación con la bajada del ex presidente Lagos. El Arco Iris, triunfante por 20 años, inicia una mutación de colores y mezclas que no eran propios, impensables, cuando la coalición dio forma.
Su principal líder natural pidió algo tan elemental como es el orden, un actuar consecuente con los principios que inspiraron a la Concertación en sus primeros tiempos, ideas nuevas, programas concretos y una lista parlamentaria única que garantizara gobernabilidad (declaraciones de octubre y noviembre). Tales propuestas no encontraron eco en un conglomerado donde el poder les ha acostumbrado a la vida política fácil, a los buenos puestos siguiendo un cuoteo, eso sí muy ordenado, donde los rostros han envejecido, solo cambiando, de tanto en tanto, de oficinas, escritorios y sillones, pero casi siempre los mismos.
Ya no se piensa en el país con la mística, innovación y espíritu de sacrificio del pasado. Se sigue practicando el mismo discurso sobre la dictadura y añorando a Pinochet. El peor negocio fue que se muriera.
Ahora aparecen algunos desaparecidos y exonerados que nunca fueron, amén de figuras en el ámbito político público que siendo parlamentarios o teniendo altos cargos, en la derecha y en la izquierda, cobran pensiones por esa razón, exonerados, me imagino de por vida.
Lagos se baja de una candidatura pese a todas las rogativas, cartas, llamados telefónicos. Los promeseros peregrinaron a París, lo llamaron a Washington, se reunieron con el futuro candidato en Santiago, pero el hombre declinó y con razón.
Qué orden puede haber, hoy se negocian los cargos públicos siendo muchos, senadores y diputados, agentes de enganche de aquellos más afines, sus operadores, que permiten las reelecciones sucesivas y los ascensos de la cámara al senado, asunto no menor ante elecciones presidenciales y parlamentarias.
Cada cual tiene una agenda propia, se perdió el espíritu de equipo y los objetivos generales que permitieron a la Concertación tener una clara mayoría que hoy, no se puede desconocer, llevaron adelante avances y transformaciones.
Sin embargo, el Transantiago, el tren al sur, los puentes que se caen, las coimas, el desfile de altos cargos en los tribunales de justicia acusados de fraude al Fisco, malversación de recursos fiscales, Chiledeportes, el pago de altas multas por parte del estado a las concesionarias, robo hasta de bencina, sobresueldos en efectivo que fueron liberados por decreto de pago de impuestos, privilegios que la señora Juanita no tiene, demuestran el rapiñaje, las pequeñas raterías de algunos personajes cuyo único mérito fue exhibir un carné de militancia política. Ante esas situaciones, se escuchan pocas frases de condena del mismo oficialismo. La costumbre de mirar la militancia antes que la capacidad, se mantiene como en sus mejores tiempos. Incluso adherentes de la Concertación, gente de gran capacidad, ha quedado al margen. Todo ello hace que alguien como el ex Presidente Lagos no quiera ser parte de la competencia presidencial.
Antes de Pascua la Udi debería decidir qué camino toma, levanta candidatura propia y compite con su aliado R.N., sino, a regañadientes, se suma a la campaña de Piñera. Si la Concertación tiene problemas la Alianza no lo hace mejor. Si la Concertación aún ve fantasmas pinochetistas en cada rincón, la UDI y R.N. siguen con una democracia protegida, manteniendo a ultranza el sistema binominal y sin lograr acuerdo en inscripción electoral automática y voto voluntario.
Maduremos. El electorado chileno se merece algo de respeto. En cada encuesta la clase política se deteriora más en su imagen frente a la ciudadanía. En la última, dada a conocer el viernes, la consultora Imaginación, de propiedad del ex ministro Enrique Correa, la Alianza supera a la Concertación en intención de voto con un 39,1%, contra 31,2. Pero hay un tercio de los electores que no encuentran en los partidos respuesta a sus inquietudes.
Surge como una estrella fugaz la candidatura Farkas, hoy también de baja voluntaria. En la misma encuesta que mencionamos obtiene un 5,3 % y Eduardo Frei un 6.7. Nadie parece darse cuenta, en una borrachera de arrogancia, que la ciudadanía está enviando un mensaje. Se buscan rostros nuevos, discursos diferentes, actitudes distintas. Pero ahí están los de siempre prometiéndonos un futuro mejor mientras que la señora Juanita, que se está poniendo viejita, pregunta ¿y cuándo tendremos presente?