La encuesta Adimark, tomó la temperatura al estado de salud de la política chilena, de paso, mostró a un electorado que se siente con poder y capacidad de emitir opiniones, dejando de lado la postura ideológica personal. Juzga los acontecimientos en su mérito. Demuestra una madurez mayor donde son los políticos los que siguen al ciudadano.
Navegando en la mar gruesa de las próximas elecciones, las encuestas muestran a un Concertación con menor apreciación positiva que el oficialismo. A un Presidente Piñera a quien se le comienzan a reconocer sus méritos, y a un Congreso Nacional que va “cuesta abajo en la rodada”. No aprenden en el parlamento, no escuchan ni entienden, lo que la ciudadanía quiere.
El escándalo de los falsos exonerados se esconde en una cortina de humo, cuando se dice que existe aprovechamiento electoral. No es así, los primeros denunciantes de estos abusos fueron los propios dirigentes de los exonerados. Tellier que era “asesor” de un senador P.C. recibe una pensión. Uno entiende que esa ayuda se hizo para todo quien perdió un puesto público y es justo que incluso senadores y diputados en ejercicio el 73 y actualmente en el congreso, lo sigan recibiendo. Pero recogiendo las mismas declaraciones del diputado Teiller, ¿cómo se explica que sean exonerados políticos los casi 2000 funcionarios que, el parlamentario reconoce, tenía el partido comunista? ¿Quién pagaba el sueldo de esos empleados, el Estado de Chile o el partido? A lo mejor sus rentas salían del erario nacional, una frescura, si recordamos que el Ministro de Hacienda era el ex Tesorero del P.C Américo Zorrilla.
No puede haber aprovechamiento político electoral, cuando entre los exonerados aparecen personas que eran menores de edad, sin embargo hay parlamentarios que acreditan el derecho a percibir esas rentas.
En todas las elecciones, cualquier olla que se destapa se desacredita aduciendo maniobras electorales. Se oculta la verdad de situaciones vergonzosas, donde el aprovechamiento de la clase política queda al desnudo. No son “ventajitas” como afirma el ex Presidente Lagos, son robos flagrantes, estafas vergonzosas, donde operadores de Senadores, Diputados y dirigentes partidarios, recibían el pago por servicios prestados a costa de meter la mano en el bolsillo de los chilenos.
Nosotros los electores, tenemos el poder de sacar del parlamento a los aprovechadores con la fuerza de nuestros votos.
