21.7.10

La política de los pobres


Cada día parece más desordenada la política chilena. En algunos casos demuestra la ignorancia de algunos parlamentarios, como un diputado, amenazó con una acusación constitucional al Subsecretario de Deportes, lo que no se contempla en la constitución.
Otros pecan de inconsecuencia. Hay quienes dicen que la pobreza es culpa de otros, no de los que gobernaron.

La serenidad, la reflexión y pensar en el bien del país ha mostrado a una clase política inmadura, dividida, solo preocupada de desacreditar al adversario. Ha llegado incluso a pelear con su propia sombra, especialmente con la pobreza, en la anterior coalición gobernante.
Senadores, como Andrés Zaldívar, creen que la Concertación debe hacer una profunda revisión de los errores cometidos durante su último gobierno, pero esa necesidad ha sido reemplazada en una constante, criticar al gobierno por todo. Cada escándalo que las nuevas autoridades descubren, se deriva a la excusa que solo son pretextos para atacar a la ex mandataria Michel Bachelet.
La encuesta Casen desató las críticas, incluso de la Iglesia. Se nos había vendido la idea que la pobreza se batía en retirada ante los amplios programas sociales que se había puesto en marcha en el último cuatrienio, pero las cifras mostraron lo contrario.
Los análisis dejaban en claro que, a más recursos invertidos, nulo avance, solo un gran retroceso. Un sector de la Concertación hizo una fuerte autocrítica, mientras otro defendía la obra de la ex Presidenta, auto flagelantes y auto complacientes, emergieron nuevamente en una coalición que se niega a enfrentar sus propios fantasmas.
La verdadera igualdad de oportunidades y la meritocracia, se fueron por la borda. Llegaron, en todos los niveles o permaneció, en el gobierno pasado, un grupo de personajes que desviaron fondos, pagaron sobre precios, en definitiva, dilapidaron los recursos del Estado impidiendo que el dinero llegara a los pobres de Chile.
El resultado conocido no explica que todo sea culpa de la crisis mundial, ya que se nos aseguró, a los chilenos, que el país tenía dinero de reserva para enfrentarla. Lo que ayer era una fortaleza hoy suena a disculpa y justificación.
Proyectos mal gerenciados, con administradores deficientes y poco capacitados, hicieron que el dinero se fuera a cualquier parte, menos donde se debía invertir.
Negar esos hechos es desconocer que los chilenos estamos más, y oportunamente, informados que antes.
La constante perorata contra la iniciativa privada. El ensalzamiento del servicio público como única virtud nos deja donde estamos, en un profundo interrogante, sin reconocer si se ha entrado a saco en los recursos fiscales, en nombre de los pobre, o ha sido simple ineficiencia.
Crecimiento y justa redistribución fue lo que faltó y la encuesta Casen lo señala con claridad.
Acaba de conocerse, por ejemplo, otro escándalo de sobre precio de terrenos; la Armada vendió en Quinteros tres hectáreas a un particular el año 2008 por una suma cercana a los 100 millones de pesos, las mismas que, después, el Minvu compró en 700 millones de pesos para la construcción de los conjuntos sociales El Mirador 1 y 2, vale decir el Ministerio de la vivienda pagó siete veces el valor original. ¿Quién se benefició? con el sobreprecio, lo pobres no, por supuesto, hay un sumario ordenado la semana pasada.
Da la impresión que la V Región la llevaba en esto de los escándalos con el dinero Fiscal.
Esa autocrítica al dinero que se perdió, en Codelco, en Corfo, Chiledeportes, Onemi, Conadi, Ministerio de la Vivienda, Transantiago, pago de sobresueldos, Mop Gate etc., no se ha hecho en profundidad, solo se lanza una cortina de humo por los conflictos de interés, un supuesto sobre lo cual no hay ninguna acusación clara de que el Estado ha sido defraudado. Para lo que está probado, incluyendo condenas, solo el silencio.
Ocurrió en salud, con viajes al extranjero, un total de 3.193 viajes, vale decir 16,6 a la semana, incluyendo exóticos destinos como Tailandia, Vietnam, Malasia, Kazajistán, Emiratos Árabes, Kenia, Mali etc., en los últimos cuatro años
Incluso un funcionario del departamento de informática del Ministerio fue a España y no regresó. Tenía permiso sin goce de sueldo. El Ministerio le prorrogó el contrato y le siguió pagando el sueldo durante dos años por un total de 31 millones 323 mil 739 pesos.
Nos vieron, perdonen la expresión, las canillas, a los pobres también.