1.11.08

Ser o no ser, ese es el dilema ¿O la pregunta?


Pese a los abrazos, aplausos, manos unidas y levantadas, en la Moneda no había ganas para festejos, más cuando fue necesario completar la foto de familia, con la presencia del Presidente del partido Comunista y de la electa alcaldesa de Pedro Aguirre Cerda, ambos opositores a la concertación. Un dilema para el gobierno que se mantiene a la luz de lo que viene en un año.

La pregunta que muchos se hacen hoy es ¿lentamente se reconstruye la Unidad Popular?, En lo personal no lo creo, pero, mientras la derecha política mantenga la tozudez y falta de realismo de la política del siglo XXI, creyendo que la democracia moderna requiere de protección, manteniendo el sistema binominal a ultranza, las maniobras del oficialismo tendrán que estar orientadas al flirteo permanente con el comunismo.

El 9% de votos que controla el pacto Juntos Podemos Más, permite reponer lo perdido por el desgaste propio de gobernar tantos años y la convivencia de una seguidilla de escándalos y, en segunda vuelta, cubrir lo que pueda ganar la oposición..

Después de las municipales quedó claro que, aunque ganó en numero de votos en concejales, la Concertación debió reconocer su desilusión por los resultados, añadiendo mutuas recriminaciones y, de paso, la renuncia de Soledad Alvear a la presidencia de la falange y a su pre candidatura presidencial.

El pacto por omisión con los comunistas, no se puede negar, fue una buena estrategia que habría sido más efectiva si se hubiera aplicado en otras comunas donde la Democracia Cristiana no dio más cuerda. En la DC ahora piensan en girar un poco más a la izquierda, sin darse cuenta que el centro político, PRI independientes y otros ya han superado el 7% de los votos.

La Alianza parece no darse cuenta que, seguir poniendo trabas a la eliminación del sistema binominal, lo único que hace es legitimar pactos por omisión que tampoco facilitan que la democracia se exprese de manera transparente.

Hay que permitir que partidos como el comunista se expresen y compitan con libertad, aunque esa doctrina, donde aún gobierna, no permitan prensa libre, o la existencia de partidos contra los cuales pueda competir.

La democracia se fortalece si es consecuente con lo que predica. Sin el sistema binominal no hay excusas para formulas como la omisión, nombrar candidatos que luego no hacen campañas o pactar con quienes posteriormente serán opositores. Todas estas prácticas confunden al electorado y son parte del creciente desprestigio que tiene la política en Chile.

En su lucha por aferrarse al poder, la Concertación ha dejado en el camino mucho de lo que encantó en el pasado a sus electores. Las ideas innovadoras, el idealismo por servir y hacer realidad los proyectos han sido reemplazados por un salvaje cuoteo, una lucha por conseguir los mejores puestos, presionar por cargos y por buscar las mejores remuneraciones personales, sin dejar de mencionar la corrupción, de algunos altos cargos, en el uso de recursos fiscales, varios ya sancionados por la justicia y otros que aún queda por descubrir.

Si la concertación sigue retrocediendo será única y exclusivamente porque la ambición de permanecer en el poder, los egoísmos de quienes quieren seguir escalando posiciones políticas y ganando influencias, la están minando interiormente. ¿Las buenas ideas se acabaron?

Si logra mantenerse en el poder un período más solo será porque, al frente, tiene una oposición tan desordenada como el oficialismo. Es una oposición que se ha quedado en el pasado, en la lógica de los buenos y de los malos, descalificando más que proponiendo.

El gobierno, ahora, ofrece un cupo en el directorio de Televisión Nacional a un militante comunista, concordante con la propuesta de Viera Gallo de integrarles al gabinete de Bachelet. Lo que propuso el Ministro General de la Presidencia no es una ocurrencia personal, fue un misil político cuidadosamente estudiando para ver como caía. Como el resultado de la ocurrencia fue malo se desechó diciendo que solo era una idea personal .

Este pololeo extra marital, Concertación Partido Comunista, es una muestra clara de un desorden que el oficialismo no sabe como resolver.

En definitiva la elección municipal eligió Alcaldes y Concejales pero dejó como en Hamlet vigente la pregunta, ¿Ser o no ser?.